Terapias para despistar 2.

Hasta hoy, luego de la última vez que salí, volví a tener noticias de otro personaje, que según me ha contado el imaginario del que hablo, le salió por la 37 con 6a frente a una urbanización cuyos apartamentos son rojos, y dan a la calle separados por una verja extensa alrededor de un espacioso  jardin. Extraña coincidencia porque parecía estar esperando a que pasara por ahí en un sitio donde nunca lo había visto,. ya que siempre aquel lo buscaba por los negocios que frecuentaba en el centro, y que se le parecía a uno que le salió una  noche muy temprano por la quinta, llegando a la avenida 60 con 5a. junto con otro  para atracarlo, y de eso ya hace algunos años; mientras que  el vigilante que trabajaba en aquella caseta de esta urbanización relativamente nueva, y que está cerca de un edificio que no está terminado, donde hay o hubo una EPS o algo parecido,  salió a gritarles, como si supiera, o porque fue avisado telefonicamente por una radio patrulla que pasaba; y que lo salvó de que lo atracaran. Personaje que puede ser este, pero por lo menos siempre le ha venido saliendo y provocando casi desde que llegó a Ibagué, como si algún imaginario lo hubiera señalado. A pesar que parece medio loquito, y así lo parece porque lo a visto por las calles del centro como drogado, y comenzó a rezongar y amenazar, y en tono provocador se orinó al frente de esa urbanización que digo, como si con esto le quisiera decir algo, o enviar algún mensaje de lo que le podría suceder(de un atraco, de un arrollamiento por un carro, o tratando de hacer recordar algún suceso en su vida)basado en que siempre le enviaban este tipo de personajes para amedrentar, muy al estilo de lo que hacen ciertos imaginarios de mala fama que les gusta amenazar disimuladamente en medio de esas vigilancias, y en las que muchos terminan confundidos. Algunos muertos también cuando estos esbirros mandados cometen sus felonías y al estilp de los ladrones que saben a quien robar. Y sí, en ese instante le recordó aquel atraco cuando fue a orinar por los lados del colegio Alberto Castilla, como si en verdad desde hace muchos años alguien le hubiera echado a este vendedor de revistas y dulces en las calles  del centro de la ciudad, y es que en aquella ocasión uno de los agentes que acudieron en su ayuda, cuando pidió auxilio desde la casa de unos vendedores de cuadros en el centro de la ciudad, le dijeron que habían acudido porque les avisaron de una estafa, y no era cierto porque aquellos  le prestaron el teléfono, y él mismo les avisó. Y que luego, la misma vendedora y compañera del otro les mostró ante la duda de uno de los agentes cómo le quedó su espalda con la camisa rota y la piel llena de las esquirlas de arena cuando los atracadores trataron de arrastrarlo mucho más al fondo de aquella zanja por donde pasa un río y que algunos dicen que es "La Pioja". 

- Los de allí no fueron, dijo uno de los agentes, señalando para el otro lado de la quebrada que hay. Y tampoco creo que los de este tampoco, además la pantalla abarca todo este sector. Véala. 

Y la señaló. Iba de lado a lado de la calle donde está el colegio, y que abarca aquel sector.  Lo que quería decir que los ladrones ya sabían para dónde iba a veces cuando buscaba un sitio para orinar en el barrio Tolima Grande.

Nuestro personaje miró entonces a ver si aquel conjunto tenía alguna pantalla, pero no vio nada, basado en ese recuerdo. Personaje que frecuenta siempre el centro, y supo de este una vez en que iba por la carrera 1a. llegando a la calle 17 como si lo conociera, le dijo que estaba bueno para chuzarlo, mientras se burlaba con otro y haciendo el amague con una de sus manos de que llevaba un arma blanca; y de eso ya hace muchos años, que cada que lo ve desde aquel asalto frustrado por la quinta llegando al Jordán, siempre le  hace los mismos gestos amenazantes, como si se sintierra frustrado por no lograr lo que digo aquella noche. Aunque según me contó, nuestro personaje, podría estar equivocado. Sin embargo sus amenazas siempre han sido constantes por las calles desde esa época, y es como si por lo alto, alguien se lo hubiera enviado a propósito, lo mismo que a muchos otros personajes de calles que le han salido a amenazar, y sin siquiera conocerlos o saber quiénes son; una constante que se ha dado de manera permanente en esta ciudad, y no igual, a lo mismo que le sucedió en Bogotá. Sí, orinar en la reja le recordó aquel atraco de hace casi tres años. Eso cree el personaje que digo, ya que otros como venía diciendo han hecho reiteradamente por las calles, comenzando por uno que al otro día de regresar después de varios años a Ibagué, y al Jordán, le salió como si algún personaje siniestro que tuviera poder sobre él, lo mandara con ese tono amenazante, y desde ahí siguió con el mismo cuento hasta que el día que se trasladó a la 1a. etapa del Jordán, en el día del trasteo por la noche lo estaba esperando para vomitarse casi encima sobre los zapatos, por la calle de doble vía y principal por donde pasan de las busetas hacia Mirolindo en la etapa tres del Jordán . Un recogedor de mangos. Y claro que hay más, porque según me contó en Bogotá no le había pasado esto con tanta frecuencia y sevicia de amenaza directa, y menos que lo atracaran tan de seguido como si por lo alto alguien se los estuviera echando. Lo mismo que otro que des el primer diciembre que estuvo luego de regreso lo intentó atracar un 25 de diciembre muy cerca en aquel edificio no terminado y que luegio de los años terminaría sabiendo que era este cuando con el tiempo se volvió vigilante de islas de autos, y que se lo daria a entender cuando viviendo ya en la etapa 1o. del Jordán le saldria a amenazr con un palo de escoba y que como caso curioso todos estos y otros son como viciosos. O sea que...

Y eso, que según decía que Ibagué era un vividero. Y claro que en Bogotá a pesar de todo no sería tan de seguido, y menos tan cerca de donde vivía, como si con eso le crearan el temor dentro de su misma vivienda. Aunque en Bogotá si le salía una loquita con frecuencia, que después descubrió, era como familiar o algo parecido de un vecino que vendió la casa adonde vivió más de treinta años a una familiar suya, porque parece que esa otra casa era del mismo dueño. Aunque ahora es como si detrás hubiera todo un trabajo de inteligencia. Y no. Hay escritores y libretistas y otros que publican sus libros y no tienen ningún problema. Según entiendo toda su historia comenzó desde niño, y parece es por alguna relación de familia que desconoce, o que siempre ha existido ese complot. Lo último que le sucedió es una especie de montaje para amedrentar o, pero que en grupo otros le hablen por las paredes.
-Está loco, diría Mentiras Frescas. Así es como escuchan voces estos. 
 
Bueno, Ud. llega a vivir a una casa, y otro lo mira con cara de yo no fui, y sin entender porqué,  y después sigue haciendo lo mismo, tanto así, que según me dijo,  Voz de Humo nunca lo dejó de hacer hasta que terminó obligado a abandonar aquella casa por los complots frecuentes de todo un vecindario, y a quienes conoció y convivió por más de  treinta años, y como si fuera alguien que para otros no tenía derecho a vivir allí Este personaje escuchaba muchas voces a propósito por aquellos vecinos acuciosos de aquel interior y que le insinuaban que obedecían ordenes subrepticias de otros, ya que en una ocasión cuando pasó en un concurso para docentes del distrito, bloquearon el lugar de la citación en el listado por la web del distrito, que solo cuando se venció el día y la hora de la entrevista, la volvieron a activar, mientras otros le daban a entender que estaba loco, o le gritaban por las calles aledañas de aquel barrio para provocar o amenazar, mientras lo amenazaron en todo el tiempo que vivió allí. En esos teatros a Ud le arman enemigos aparentes para que otros le echen cuentos diría Mentiras Frescas porque estos si son expertos en inventar sus complots.  Casi lo mata Ojos Azules, y de eso ya  van más 25 años. Así le sucedió, según su historia donde Voz de Humo siempre le salía, y era el hijo de un imaginario, y era como si fuera un enemigo, tanto así que parecía obedecer órdenes de su papá que era un imaginario que recién llegado a vivir a aquella casa, disimuladamente soltó un perro guardián que casi lo castra; y cuando todavía este, no me había contado sus historias, ni existía el internet, ni todo lo que usamos para contar nuestras historias. 

Allí, según supe fueron 11 años tortuosos, después de vivir otros 20 años en la misma casa, pero no como ahora que volví a saber de este, que desde que cambió de vivienda no le han dejado de hacer sus teatros como si estuvieran armando una historia al estilo de las de Shakespeare, o la del Proceso de Orson Welles.

Aquel joven se deleitó ese día, y que concuerda cuando frecuentaba "El San Pedro Alejandrino" donde uno que tenía un café internet le borró una pagina de un blog que había comenzado en Bogotá y que por los años del 2.006 quiso continuarlo. Por ahí anda colgado por la web ya que habría que corregirlo, y entonces se sabría de toda una conspiración. Lo bueno es que su hacker conoce a toda su familia, que cada curso que hacía del Sena Virtual siempre le recordaba a algún familiar, aunque al finalizar los cursos, otros eran los tutores virtuales. Una comedia muy hilarante como si dicho personaje fuera muy importante. Tan raro. Si nadie lo conocía antes, ya lo era para estos que le han arrojado loquitos, y por qué no..?. Y por más que cuenten unas historias sobre este personaje, creo que son más acertadas la mías por que me las ha contado de viva voz sobre como lo han tratado de enredar, sin saber con qué fines. Aunque es probable que tengan otras historias que desconoce, y mucho menos ya que hasta ahora he vuelto a saber de este. Como iba diciendo, estaba justo ahí esperando a que pasara para comenzar con su cháchara, y de  paso crear la inseguridad de salir o no salir, o de no andar tranquilo por la calle, algo que sus comediantes lo hicieron muy bien en otro tiempo hasta que casi lo matan. Vayan por allá a el Quiroga y todos eso barrios cercanos, es seguro que algunos de esos dueños de tiendas y negocios se acordaran de este, aunque debo de decir que ninguno de esos comerciantes lo apostrofaron porque se sostuvo haciendo rifas con unas artesanías que fabricaba. Eso me ha contado, y creo que aquí, según entiendo tampoco, pero sus perseguidores han ido cambiando de estrategias con el fin de amedrentar, o por qué no, crear un enemigo en medio de esos montajes de teatro que el que se de cuenta, dirá que son absurdos. Es curioso, en aquel interior entre ellos resultó ser una especie de enemigo público sin saber por qué, muy al estilo de lo que pasó con el personaje basado en la novela de Kafka y llevado al cine por Welles, pero que muy al estilo de las comedias de Shakespeare, a veces son tenebrosas cuando escucha entre la paredes sus amenazas; que estando muy joven fue  a donde un amigo, que le iba a prestar un dinero para sacar un reloj que tenía empeñado en las prenderías de la décima, y que según dice, los detuvieron unos agentes de aquel organismo secreto extinguido en sus funciones hace poco por el gobierno,  y los llevaron a dicho organismo para interrogarlo. Cuán no sería su sorpresa, que luego de dos días, uno de estos funcionarios lo llevó a un interrogatorio, pasó y se detuvo unos instantes a ver cómo, en un teatro que tenían, practicaban con arengas y discursos simulados, muy al estilo de las comedias isabelinas de Shakespeare. Aquel personaje del cuento en esos años cursaba el final del bachillerato nocturno de la Universidad Gran Colombia, al frente de aquel organismo secreto; y estos creían que  era ...Un bobo, mejor dicho. Así supo de estos trabajos en los que a veces no creo. Son los estigmas a los que nos llevan estos imaginarios que a veces terminan confundidos, o se hacen. Sí, parecen historias irreales y absurdas. Pero que lo amenacen disimuladamente, luego de un robo, es más ficti que ficti. No te lo puedo creer, diría el imaginario del que hablo.    
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